De profesora de matemáticas a estrella de OnlyFans
A sus 24 años, la argentina Martina Cuffaro Russo, graduada como profesora de matemáticas en el Instituto de Educación Superior Nº 28 “Olga Cossettini”, tomó una decisión que cambió radicalmente su vida: abandonó su carrera en la docencia para dedicarse de lleno a la creación de contenido para adultos en OnlyFans, una plataforma que hoy le genera ingresos mensuales estimados entre 12.000 y 15.000 dólares.
Aunque su trabajo como docente le ofrecía estabilidad económica, Martina confesó que no se sentía plena:
“No quería depender de una jubilación ni levantarme a las seis de la mañana todos los días para ser empleada de otro”, explicó.
Con tan solo 18 meses de experiencia en el sistema educativo, decidió buscar nuevos horizontes profesionales, motivada por su pareja y su comunidad en redes, que ya superaba los 13.000 seguidores.
De contenido fitness a un negocio digital rentable
Su incursión en el mundo digital comenzó con publicaciones relacionadas con el fitness, pero fue su audiencia quien la impulsó a explorar el terreno de OnlyFans. En un principio, Martina se mantuvo en el anonimato, promocionando su contenido en canales de Telegram y evitando llegar al público argentino. Su contenido inicial era “soft”: fotos en bikini, ropa deportiva y relatos eróticos sin desnudez.
Al comprender el funcionamiento del algoritmo de la plataforma, logró posicionarse mejor, ganar más visibilidad y multiplicar sus ingresos en pocos meses.
Entre sus encargos más llamativos, recibió 2.000 dólares por un relato personalizado con temática de humillación fetichista, demostrando que existe mercado para todo tipo de nichos.
“Cada una elige hasta dónde quiere llegar. Hay clientela para todo tipo de contenido, y yo siempre respeto mis propios límites”, aclaró.
En la segunda mitad de 2024, Martina decidió mostrarse públicamente y promocionar su perfil de OnlyFans desde Instagram y TikTok, lo que impulsó aún más sus ganancias. Hoy cuenta con más de 105.000 seguidores y ofrece asesorías personalizadas a mujeres que desean incursionar en el mismo rubro, con un valor de $55.000 pesos argentinos.
Además de enseñar estrategias para monetizar contenido, promueve un mensaje de empoderamiento femenino:
“No hace falta sexualizarse ni tener un cuerpo hegemónico. Es cuestión de actitud y de saber vender una experiencia”.
Inversiones, independencia y críticas
Con los ingresos obtenidos, Martina compró una moto, dos iPhones y realizó inversiones personales. Aunque en un inicio mantuvo en secreto su nueva actividad, finalmente se lo contó a su familia cuando los resultados económicos fueron evidentes:
“Fue un shock, pero luego entendieron. Soy adulta y tomo mis propias decisiones”.
No obstante, su exposición pública también la convirtió en blanco de críticas. Diversos usuarios en redes cuestionaron que proyecte una imagen irreal del éxito económico en OnlyFans, ya que según estadísticas compartidas, la mayoría de los creadores ganan entre 150 y 180 dólares mensuales, en un mercado con alta competencia.
Martina defiende que su caso no es casual:
“A los nueve meses ya tenía 100.000 seguidores y un cambio personal increíble. Este trabajo me dio independencia, libertad y tiempo para mí”.
Actualmente, Martina no solo disfruta de su independencia financiera, sino que también busca motivar a otras mujeres a emprender sin miedo ni prejuicios. Su historia es una muestra de cómo las plataformas digitales, cuando se usan con estrategia, pueden convertirse en una herramienta poderosa de transformación personal y profesional.