Influencer anónimo conmueve las redes con su altruismo hacia emprendedores
Manizales, Colombia – Un creador de contenido oriundo de Manizales ha capturado el corazón de miles de usuarios en redes sociales gracias a sus acciones altruistas y filantrópicas dirigidas a emprendedores y vendedores ambulantes, tanto en su ciudad natal como en otras como Medellín. Se trata de Camilo Cifuentes, un influencer que ha logrado fusionar la empatía, el respeto y la generosidad en cada uno de sus videos, manteniendo su rostro en el anonimato.
La labor de Cifuentes ha cosechado una impresionante comunidad en línea, con 4.2 millones de seguidores en TikTok, 326 mil en Facebook y más de 800 mil en Instagram. Su contenido se aleja de la búsqueda de la viralidad a través del escándalo o la polémica, enfocándose en la transformación de vidas a través de la bondad. A cada persona que ayuda, la saluda con un afectuoso "mi niño" o "mi niña", y su ya característica frase "yo no tengo afán" se ha convertido en un emblema de su actitud comprensiva y humana.
El anonimato como filosofía de vida
El joven creador manizaleño ha optado por preservar su anonimato. En una entrevista con el canal regional Telecafé, explicó que esta decisión responde a su deseo de evitar el protagonismo: "Lo prefiero porque los protagonistas son las personas. Yo no quiero darme a lucir, no quiero que me conozcan y no quiero generar fama. Cada vez me doy cuenta de que el anonimato es lo mejor porque es la libertad".
Cifuentes atribuye sus valores sólidos a su crianza en una familia amorosa. "Mi familia me ha enseñado que siempre es mejor dar que recibir", expresó durante la misma conversación. En su noble misión, no está solo: "Mi equipo de trabajo son cuatro personas: mi mamá, mi hermano, mi novia y yo", añadió.
Camilo recuerda con especial emoción el video que se viralizó sobre una joven vendedora de fresas con crema. "Ella pasó de vender 20 fresas un fin de semana a vender 300", compartió, ilustrando el impacto tangible de su generosidad. La labor de este influencer anónimo continúa inspirando y demostrando el poder de la bondad en el mundo digital.